Este no es un factor que deberías dejar de lado ya que, para los profesionales de los Recursos Humanos, los colaboradores son el recurso más valioso.
En este contexto aparece el ghosting laboral, el cual es un fenómeno que se hace cada vez más común entre candidatos y colaboradores. ¿Sabes qué es ghosting en el contexto laboral? En el siguiente artículo te contamos qué es el ghosting laboral y cuáles son sus principales causas.
¿Qué es el ghosting laboral?
Desafortunadamente, hoy el ghosting es bastante frecuente en el mundo laboral. Esto sucede cuando, en medio de un proceso de reclutamiento, uno de los candidatos abandona el proceso y corta toda comunicación. No hay explicaciones ni motivos aparentes, nada. Aquel es un caso de ghosting de candidato y un verdadero problema para los reclutadores. Sin embargo, el ghosting en el mundo laboral no solo se da en la etapa de selección.
Puede ocurrir también que tenemos un colaborador nuevo y en el transcurso de sus primeros días o semanas, este deja la empresa sin previo aviso o explicación. Simplemente no se llega a saber más de ese trabajador. El resultado, como puedes imaginar, no solo es un puesto vacante que se debe llenar rápidamente, sino también muchas dudas de cara a un posible problema interno que ahuyenta el talento. ¿Qué hizo que el trabajador tomara tal decisión?
El hecho de que un candidato o trabajador nuevo corte toda comunicación con la empresa no es algo reciente. Sin embargo, se trata de un problema que se hace cada vez más común entre las personas más jóvenes, especialmente luego de la pandemia. De hecho, cerca del 20% de trabajadores de la generación Y (Millennials) y de la generación Z (Centennials) dejaría un empleo luego de un mes o menos si este no satisface sus expectativas.
El ghosting laboral suele aparecer durante un periodo específico del ciclo de vida del empleado. Este se extiende desde la etapa de reclutamiento, hasta los primeros meses de trabajo en la empresa. Luego de aquel periodo, las probabilidades de ver este problema en la empresa son menores. Las cifras son bastante claras al respecto: más del 30% de profesionales que ingresan a una empresa se van durante los primeros 6 meses. ¿Por qué se van y qué se puede hacer al respecto?
5 causas del ghosting laboral
El primer paso para reducir las posibilidades de sufrir un ghosting es identificar correctamente las posibles causas de esta práctica:
Escasa claridad en las ofertas de empleo
Como hemos visto, la deserción de empleados se produce fundamentalmente durante el proceso de selección.
Una de las causas más comunes es publicar una oferta laboral ambigua o con escasas especificaciones sobre las funciones a desempeñar o las retribuciones del puesto.
Por ello, a medida que el proceso va desvelando los pormenores de nuestra vacante, muchos candidatos reevalúan la oferta y deciden abandonar el proceso antes de que este finalice.
Días de prueba
Otro de los momentos críticos se produce durante los primeros momentos del empleado en nuestra empresa. Es común encontrarse con que la empresa quiere ver como la nueva incorporación se desenvuelve en el entorno laboral para, a partir de aquí, tramitar el contrato.
Esto es un gran error ya que la falta de un vínculo legal puede facilitar que el candidato se decante por hacernos ghosting.
Exceso de tareas antes de empezar, causa del ghosting
Una de las razones detrás del ghosting laboral es que muchas empresas asignan ciertas tareas al nuevo empleado antes siquiera de que este se haya incorporado a su nuevo puesto de trabajo.
Dicha práctica puede generar estrés laboral y ansiedad en el candidato ya que puede sentir que la carga laboral es demasiado alta, lo que puede derivar en un abandono repentino.
Falta de vínculo emocional entre el trabajador y la compañía
Habitualmente, una vez concluido el proceso de selección, la empresa no muestra mayor interés por el nuevo empleado, provocando que este no se sienta parte del equipo y que no llegue a interiorizar los valores de la compañía.
Sentirse desconectado emocionalmente de la empresa hará que el trabajador se replantee su decisión sobre aceptar o no el puesto. Esto puede derivar en ghosting laboral.
Miedo a los superiores
Un amplio número de los empleados que desaparecen sin dejar rastro lo hacen porque les atemoriza enfrentarse a sus jefes y decirles cara a cara que desean renunciar a su puesto de trabajo.
De hecho, en Japón, donde está especialmente mal visto dimitir, existen empresas que llevan a cabo todas las gestiones para que el trabajador no tenga que hacerlo personalmente.
Cada vez está más presente en las empresas que para asegurar el rendimiento hay que cuidar todas y cada una de las fases del ciclo de vida del trabajador.
Por ejemplo, en los primeros días el onboarding es clave para que el trabajador se adapte a sus funciones y compañeros y, en contraposición, también hay que cuidar su desarrollo, formación e incluso salida.
Otras manifestaciones de ghosting
Existen otras manifestaciones de ghosting mucho más preocupantes y es aquella conocida como «el castigo silencioso», descrito por Erica Dhawan en su libro «Digital Body Language».
Esta práctica se refiere a esos jefes o colegas que deciden dejar de comunicarse (por correo electrónico, por teléfono o en las conversaciones informales en las diferentes áreas de la empresa) o minimizar los intercambios de información, hasta el punto de dejar de ponerse al día.
Existen varias razones para que esto suceda: un pico de estrés en la oficina, un comportamiento de evasión o una estrategia para sortear el conflicto. En estos casos, la situación suele resolverse cuando desaparece el motivo central del conflicto.
Sin embargo, las alarmas realmente deben encenderse cuando un jefe usa el silencio como castigo: adoptan una actitud pasivo-agresiva contra algún empleado incómodo. Cuando un jefe indica su disgusto de este modo fácilmente puede desembocar en una situación de acoso laboral, sobre todo si el equipo sigue al líder y decide ignorar a su colega.
¿Cuáles son las consecuencias del ghosting laboral para las empresas?
El ghosting durante el proceso de selección o en los primeros días tras la incorporación de un empleado tiene efectos negativos para las empresas, más allá de las molestias e incertidumbre que se pueden generar en los equipos de trabajo.
El primero de ellos es la necesidad de reestructurar las tareas y los flujos de trabajo hasta encontrar otro candidato que se adapte al puesto.
Además, será necesario iniciar un nuevo proceso de selección, con la inversión de tiempo y de recursos que eso supone.
Por otra parte, el ghosting laboral puede repercutir negativamente en la imagen del reclutador, ya que sus superiores pueden considerar que no ha sido capaz de encontrar al candidato perfecto. Esto es especialmente grave cuando el colaborador «fantasma» se queda con bienes/materiales de la empresa (por ejemplo un teléfono) o cuando se marcha tras recibir la formación.
Claves para evitar el ghosting laboral
Establecer un contrato desde el primer día: Alrededor de un 54% de los trabajadores que optan por el ghosting en el trabajo lo hace aprovechando la falta de un contrato. Una de las claves para evitar esta práctica es formalizar el contrato en los tiempos adecuados. De esta forma, tendremos un documento que vincule legalmente al trabajador con nuestra empresa.
Redactar ofertas «transparentes» y detalladas: La falta de claridad hace que muchos candidatos abandonen los procesos de selección, especialmente cuando la oferta de trabajo era poco específica o cuando en el contrato no se cumplían cuestiones básicas expuestas en ella.
Mejorar la comunicación con los candidatos: Si contamos con un sistema de cribado rápido y con herramientas para comunicarnos con los candidatos de manera sencilla durante todo el proceso de selección, nos resultará mucho más fácil conocer sus intereses y realiza filtros eficientes.
Facilitar la integración del empleado: Que un nuevo trabajador se sienta a gusto es fundamental para que se comprometa con el proyecto y con los intereses de la empresa. Por eso, conviene asegurarnos de que los candidatos que acaban de incorporarse a nuestro organigrama se sientan realizados profesionalmente y seguros a nivel económico y emocional. Esto evitará que busquen otras ofertas de trabajo y que, en caso de hacerlo, opten por «desaparecer».
Por último, solicitar diferentes referencias y formas de localizar a un candidato. Mediante varios canales, más allá de un teléfono o un mail. Esto es otra forma que tienen las empresas para reducir o evitar los casos de ghosting laboral.
Conclusiónes:
Como puedes ver, el ghosting laboral es un problema que se hace cada vez más común entre las empresas. Reconoce sus principales causas y aplica las medidas necesarias. La prevención te ayudará a retener a tus mejores colaboradores.
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